Érase una vez un par de equipos que iban a disputar un partido liguero. Zaragoza y Sevilla se disponían a jugar en paz y armonía, y el partido iba por buen cauce. Pero al final del encuentro todo se estropeó...
Luis Fabiano y Diogo iniciaron una charla en la línea de fondo por un lance del juego. La charla empezó a ir a más, y se inició una bonita discusión, en la que se pudieron escuchar cosas de este estilo.
La discusión fue a más, ante la presencia de los aficionados, Diogo y Luis Fabiano querían poner en práctica aquello de "¿Qué le dicen los 5 dedos a la cara?". Las ganas les pudieron, y comenzaron a pegarse, como si de un combate de Alberto del Río se tratara.
Los golpes se sucedían, pero lo que es que impactaran... más bien poco. Se asemejaba más bien a un baile hecho de forma suave.
Los dos fueron separados por sus compañeros, y expulsados de inmediato, aunque no quedase mucho de partido, ya que era el descuento de la 2ª parte.
El Comité de Competición no se hizo esperar: les impuso una sanción de 5 partidos a cada uno.
Éste es uno de los incidentes antideportivos más recordados de la historia del deporte.
Magnifico Dani!! Me encantan tus artículos de "anecdotas" del fútbol sevillano, que siempre las tengo en mente para algún día narrar en Colussos contra Kukletas, y que tu clavas mucho antes que nosotros!!
ResponderEliminarDeberías colaborar con nosotros, tio con artículos de este tipo!! y esto es un ofreciemiento formal eh!!!
Estaría bien poder colaborar en algún articulo en vuestro blog :)
ResponderEliminarPosiblemente la pelea futbolística más ridícula de la historia.
ResponderEliminarPues el ofrecimiento está hecho Dani!! ;-)
ResponderEliminarAsí que cuando quieras!!