Ángeles Rodríguez Hidalgo, conocida como ya he dicho antes como "la abuela rockera" y que procedía del barrio madrileño de Vallecas, nació en Argentina en 1900 y sus primeros gustos musicales no tenían nada que ver con el rock, ya que obviamente su juventud tuvo lugar a principios del siglo XX y en aquella época el rock y el heavy no existían (lo más parecido (en cuanto a influencia) era el blues). Sus artistas favoritos eran cantantes de copla como Marifé de Triana o La niña de los peines.
Pero, como ya he dicho en el primer párrafo, comenzó a hacerse conocida en los años 80, gracias a que su nieto Pol Morollón la empezó a llevar a conciertos de rock y heavy, y empezó a seguir a grupos de la escena como Leño (el grupo del que luego se independizó Rosendo), Miguel Ríos, Barricada, Leño... y grupos internacionales como ACDC. Podía sorprender que una persona de su edad tuviera ganas de jarana rockera (más teniendo en cuenta que enviudó con 41 años y que tuvo que pelear para sacar adelante a sus cinco hijos con trabajos como el de asistenta en varias casas del barrio de Salamanca y en la Caja Postal (aquella caja de ahorros que formaba parte de Correos y que con el tiempo se convirtió en Argentaria)), pero así fue.
Su fama la llevó a ser invitada a acudir a programas de radio como el que tenía Paco Pérez Bryan (el cual cuenta que la conoció cuando el técnico de sonido del programa se la presentó y que ella le pidió participar en el programa) en Radio Juventud o el de José Manuel Parada en Radio 5, a tener una sección semanal en la revista Heavy Rock, a aparecer en un documental de TVE filmado por TVE junto al grupo sobredosis, e incluso a protagonizar la portada del disco "Toca madera" del grupo Pánzer (en el libro "La música del diablo" se destaca que dicho título se debe a que el grupo arrastraba el "meme" de maldito por aquella época).
Su progresiva sordera no le impedía seguir yendo a conciertos como los que tenían lugar en la sala Canciller, mítica sala situada en Ciudad Lineal donde los grandes nombres del rock y el heavy dieron tralla, y tanto los grupos y solistas como los integrantes de la tribu urbana de los heavys la conocían (no faltaba quien le invitaba a cenar o a tomar una copa por aquello del desparpajo que tenía).
En diciembre de 1993 falleció debido a una insuficiencia respiratoria que le provocó la muerte, y apenas 5 meses después se organizó un concierto en el que tomaron parte Ñu, Esturión, Asfalto y Sobredosis para poder costear una estatua, la cual se encuentra en la avenida Peña Gorbea del distrito de Puente de Vallecas (en 2015 le tuvieron que restaurar el dedo índice y meñique de una de sus manos ya que se los habían arrancado).
Fuentes: uppers.es
