Grzegorz fue fichado por el Logroñés ya comenzada la temporada 1993-94, a mediados de diciembre de 1993, con la intención de alejarse de los últimos puestos de Primera. El entonces entrenador del equipo, Carlos Aimar, se quejó de su fichaje porque, como él mismo comentaba, lo trajeron sin consultarle y no lo conocía como jugador. Aún así, lo fue introdujendo en la rotación, debutando en la jornada 18 contra el Deportivo (victoria para los gallegos por 3-0) y marcando un gol en su segundo partido, en casa ante el Oviedo (supuso el empate a 2 final).
La incorporación (mediante cesión, procedente del Wisla Cracovia) de este hombre tuvo polémica algún tiempo después. Cobraba 550000 pesetas al mes (al cambio, 3300 euros), y además se le pagaba el alquiler de la casa y el coche. Sin embargo, Grzegorz pensó que había firmado por más dinero.
Aparentemente su representante le había estafado (tiempo después Grzegorz diría que como era inexperto por su juventud nunca le reclamó un dinero que debía haber recibido), y él le reclamaba al presidente Eguizábal un millón de pesetas, billetes de avión para él y su familia y que le pagaran sus consumiciones en los restaurantes a los que iba. "Me dijeron que lo que iba a cobrar era una buena cantidad. Pero da para vivir en Polonia, no para hacerlo en España", decía. El presidente se negó, ya que estaban cumpliendo con lo que su contrato estipulaba.
La cuerda se rompió: antes de un partido contra el Rayo, dejó de aparecer en los entrenamientos y en las concentraciones, quedándose encerrado en su casa, sin coger el teléfono ni dar señales de vida. Estaba haciendo su huelga particular.
Tres semanas después de su "espantada", ante los intentos del club de llevar el caso a la FIFA, volvió a Logroño (se había marchado a su país) y entró de nuevo en la rotación (ya como suplente en vez de como titular en el principio de su paso por el Logroñés) redebutando en una derrota por 4-1 ante el Sevilla. No volvió a anotar gol alguno, quedando sus estadísticas al final de la temporada en 15 partidos jugados y un gol. El Logroñés quedó el decimosexto, el último puesto de la salvación directa, con 33 puntos (los puestos de promoción fueron para el Rayo (17º con 31 puntos, perdió la categoría en la ronda de promoción) y el Valladolid (18º con 30), en los puestos de descenso directo quedaron el Lleida (19º con 27 puntos) y el Osasuna (20º con 26 puntos)).
Grzegorz no siguió en el Logroñés, y a excepción de la campaña 1996-97 (Caen) y el último trimestre de 2001 (Adelaide City), pasó el resto de su carrera en su país natal.
Fuente: bdfutbol.com, marca.com, transfermarkt.es
