Alemania y Austria habían quedado encuadradas en el grupo 2 (que tenía como sede tierras asturianas ya que los partidos se jugarían en el antiguo Carlos Tartiere y en El Molinón) junto a Argelia y Chile. En la primera jornada Argelia dio la sorpresa venciendo a Alemania por 2-1 (los alemanes previamente habían pecado de confiados y lo pagaron con la derrota) mientras que Austria despachó su partido contra Chile ganando con un ajustado 1-0. En la segunda jornada, Chile fue vencida de nuevo, en esta ocasión por Alemania, por un contundente 4-1, y Austria ganó a Argelia por un tanteo de 2-0.
Y ya en la tercera jornada, los encuentros eran Alemania - Austria y Argelia - Chile. Sin embargo, no se jugarían a la misma hora el mismo día, sino que primero se disputaría el partido entre chilenos y argelinos el 24 de junio y al día siguiente el partido entre los países de habla alemana. Argelia, que estaba siendo la sensación del torneo, venció por 3-2 a Chile, dejando la clasificación del grupo con este orden: 1. Austria (4 puntos y +3 en goal average), 2. Argelia (4 puntos, 0 en goal average), 3. Alemania (2 puntos y 2 en goal average), 4. Chile (0 puntos y -5 en goal average). Así, Chile estaba ya eliminado, Alemania al borde de la eliminación, Argelia con mayores opciones de pasar a la siguiente ronda y Austria también con opciones de quedar clasificada mejor que los alemanes.
Las opciones de Alemania de clasificar pasaban sí o sí por ganar a Austria. Hete aquí que, dado el resultado del partido que jugaron Argelia y Chile, si Alemania ganaba por uno o dos goles de diferencia, clasificaría junto a Austria, y si ganaba por 3 o más goles de diferencia, pasaría de ronda junto a Argelia.
En el partido, que se jugaría en El Molinón, tanto alemanes como austríacos comenzaron fuerte (especialmente los germanos), y en el minuto 10 Hrubesch puso el 1-0 favorable a Alemania. Sin embargo, a partir de ahí el partido se convirtió en una auténtica pantomima en la que ambos equipos únicamente se pasaban el balón entre ellos y prácticamente no hubo ofensiva alguna en ninguno de los sentidos (había hasta conversaciones demasiado amistosas entre los jugadores de ambas escuadras). Solamente Schachner (austríaco) y Dremmler (alemán) intentaron avivar el partido, sin encontrar apoyo por parte de sus compañeros de equipo, de hecho Schachner dijo años después que Briegel (lateral de Alemania) le recriminó que corriera tanto.
El "biscotto" entre Austria y Alemania para dejar a Argelia eliminada estaba siendo tan evidente que el público presente en el estadio gijonés, mayormente español, comenzó a gritar cosas como "fuera, fuera", "que se besen, que se besen" o "tongo, tongo". Había cánticos a favor de Argelia e incluso del Sporting. Los argelinos presentes en la grada chillaban con furia (como es lógico) y lanzaban billetes al césped en forma de protesta, y los comentaristas de tv para las televisiones de Austria y Alemania llegaron a hacer cosas como pedir a los televidentes que apagaran la televisión o dejar de narrar ante la inexistente disputa del partido, que finalmente terminó con el 1-0 que daba el pase a segunda ronda de austríacos y alemanes. Hubo casos de aficionados que esperaron al autobús de Alemania a su llegada al hotel de turno para lanzar huevos a los jugadores (los cuales respondieron lanzando globos de agua desde sus habitaciones).
Las consecuencias fueron que a partir de ahí, para evitar la misma situación y más "biscottos", los partidos de las últimas jornadas de fases de grupos de los siguientes torneos de selecciones se jugarían a la misma hora del mismo día.
Fuente: es.wikipedia.org, sport.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario