Nos ponemos en contexto: tuvo lugar en la temporada 1998-99, aquella en la que, por el cierre patronal o "lockout" (como lo llaman los estadounidenses), únicamente jugaron en los primeros meses de 1999 un total de 50 partidos. Los Chicago Bulls habían sido campeones de la liga en la campaña anterior, con aquel famoso tiro de Michael Jordan a falta de unos 6 segundos de acabar el sexto partido de la final (podría haber sido su último tiro como jugador si no hubiera jugado un par de temporadas más en los Washington Wizards algunos años más tarde), pero nada tenía que ver en 1999 la plantilla que tenía los Bulls con la de 1998: Michael Jordan se había retirado, Scottie Pippen se había marchado a los Houston Rockets, Rodman se fue a Los Ángeles Lakers (equipo en el cual jugó nada y menos, apenas 23 partidos en la susodicha temporada 1998-99 (aún jugaría menos en la siguiente (su última como jugador NBA) con los Dallas Mavericks, 12)), Steve Kerr fue fichado por los San Antonio Spurs y los Phoenix Suns se hicieron con Luc Longley. Y Phil Jackson, el entrenador, se marchó también del equipo.
Básicamente los jugadores de cierta influencia y calidad que se mantuvieron en la plantilla aquel año fueron Ron Harper y Toni Kukoc. Diferentes jugadores llegaron como "refuerzo" a aquel equipo para esa temporada, y los que más nombre tenían, en mi opinión, eran Brent Barry (que en el futuro ganaría dos anillos con los Spurs) y Kornel David (único húngaro que jugó en la NBA, también estuvo jugando en el Tau (el nombre por entonces del Baskonia), el Gran Canaria y el Zalgiris Kaunas).
El 10 de abril de 1999, los Bulls recibían en casa a los Miami Heat. Aquel partido resultó ser una especie de tortura china para aquellos espectadores que decidieron permanecer en sus asientos durante los 48 minutos que duró: los Bulls sólo anotaron 49 puntos, la anotación más baja por parte de un equipo NBA en un partido desde que se implantó la regla de los 24 segundos de posesión.
Esta pobre anotación superó el récord anterior: 55 puntos de los Indiana Pacers apenas un año antes contra los Spurs. Estos 49 puntos siguen imbatidos, aunque los Miami Heat (54 puntos a los Raptors en marzo de 2008) y los Denver Nuggets (53 puntos a los Pistons en noviembre de 2002) se quedaron cerca de conseguirlo. El máximo anotador de los Bulls en aquel partido fue Kornel David, con unos pírricos 13 puntos (pese a no ser titular, fue además el que más jugó, 35 minutos), Kukoc se quedó cerca de serlo con 10. Los porcentajes de tiro fueron horrorosos: el propio Kukoc tuvo un 25% de acierto en tiros de campo, Randy Brown aún lo hizo peor con 12,5 % en tiros de campo, y el equipo en global se combinó para un 18 de 77 en tiros de campo (23,4% de acierto) y un 13 de 24 en tiros libres (54,2% de acierto).
Un partido de pesadilla para los Bulls (y sus aficionados).
Fuente: basketball-reference.com, es.wikipedia.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario