La muerte de Fernando Martín

Hoy toca hablar de un triste suceso que sacudió al mundo del deporte y el baloncesto español: la muerte de Fernando Martín, el mítico jugador español que fue el pionero en España en cuanto a jugar en la NBA se refiere.
Fernando Martín, tras una vertiginosa ascensión al estrellato del baloncesto, se fue de este mundo con solo 27 años, en 1989. Lean con atención la historia...
Fernando Martín, por aquel entonces (diciembre de 1989, época en la que un servidor aun no existía ni en el pensamiento de sus padres), jugaba en el Real Madrid tras haber vuelto de su aventura en la NBA con los Portland Trail Blazers.
El 3 de diciembre de 1989, Fernando Martín estaba lesionado por sus casi crónicos problemas de espalda que llevaba arrastrando desde su paso por Portland. Iba a recoger a su compañero de equipo Quique Villalobos para acudir al partido que enfrentaba al Madrid con el CAI Zaragoza.
Fernando Martín cogió su coche, un Lancia Thema rojo y salió a gran velocidad en busca de su compañero.
Cuando se iba a incorporar a la M-30, invadió el carril contrario, y se empotró contra un Opel Kadett (el conductor de este coche sufrió graves heridas que le llegaron a dejar en silla de ruedas).
Fernando murió debido al impacto del accidente vial. Mientras se veían las consecuencias del accidente, se extendió la noticia de que un jugador del Real Madrid había sufrido un accidente de tráfico.
En ese momento, todos los jugadores del Madrid estaban en los vestuarios del terreno de juego, excepto Martín y Villalobos. Cuando llegó Villalobos al vestuario nervioso, preguntando que había ocurrido... Todos se dieron cuenta del tema.
La noticia de su muerte creó una gran conmoción, hasta fuera de los límites del deporte (Martín fue durante un tiempo comidilla de la prensa rosa, debido a que mantuvo, al parecer, una pequeña relación con Ana Obregón, muy a su pesar (era un hombre muy reservado)).
En su honor, se realizó una capilla ardiente en el feudo madridista, a la que acudieron muchas personalidades deportivas y gente anónima de todo tipo (Audie Norris, su gran contrario, lloró como un niño en su entierro, y meses después dijo que le echaba mucho de menos, porque nadie se fajaba tanto en la zona contra él como lo hacía Fernando).
Teledeporte, en el 20º aniversario de su muerte, hizo un documental acerca de su fallecimiento, muy recomendable de ver.
Fernando está enterrado en el cementerio de la Almudena, pueden ver su tumba aquí.
Para terminar, no puedo dejar pasar la oportunidad de postear unos vídeos sobre su último adiós:






Tal vez no fuese el jugador más técnico del mundo, pero sí el que tenía más garra y más cojones (perdonen la expresión). Su lucha en el campo de juego nunca se olvidará. Fernando por siempre.