Hoy narro en este artículo cómo sucedió la muerte de la cantante Amy Winehouse en el año 2011. Lean a continuación.
Amy Winehouse había abandonado una clínica de desintoxicación llamada Priory Clinic el 31 de mayo de 2011. Su presencia en la clínica se debía a que en aquella época Amy tenía una adicción al alcohol (tras haber pasado adicciones a otras drogas, especialmente cuando estaba en una relación con Blake Fielder Civil).
Tras su marcha de la susodicha clínica, se programó una gira de conciertos por Europa, empezando por Belgrado y continuando por otras 11 localizaciones. Sin embargo, sólo se llegó a celebrar el mencionado concierto en Belgrado.
Y es que en Belgrado, Amy dio un concierto que se podría catalogar de bochornoso. Ya había dado problemas algunos días de este concierto en otro que dio en el 100 Club de Londres, donde, a pesar de ofrecer una actuación musical aceptable, dio muestras de que no había superado su adicción al alcohol, porque bebió y dio muestras de estar alterada y con mal humor. En la capital serbia, volvió a consumir alcohol antes del concierto y apareció en un estado bastante deprimente.
En el concierto dio una imagen penosa: apareció una hora más tarde de lo previsto al escenario, se llegó a sentar sobre un monitor de sonido, dejaba que los espectadores cantaran sus canciones o los integrantes de su banda en vez de hacerlo ella, se trastabillaba sobre sus pasos, se quedaba con los brazos cruzados... El concierto acabó cuando su manager la sacó del escenario, y no hubo bises. El público la abucheó durante prácticamente todo el concierto.
Fue su último concierto. Se había programado un concierto siguiente en Estambul, pero cuando se tomaba rumbo a la ciudad turca se canceló, al igual que el resto de conciertos. Y Amy siguió consumiendo alcohol en los días siguientes, hasta que en el mes de julio, solo un mes después, el alcohol fue su perdición, de forma letal.
El 22 de julio de 2011, Amy estaba en su casa, acompañada por Andrew Morris, que ocupaba una habitación distinta a la de ella. Ese mismo día recibió una visita de su doctora para observar el estado de su adicción al alcohol, y Amy se sentía sola (de hecho hizo muchas llamadas por Skype, cosa que hacía habitualmente cuando se sentía en ese estado).
Al día siguiente, sobre las 10 de la mañana, Andrew Morris fue a ver como estaba Amy, la cual estaba en su cama con el edredón por encima. Supuso que estaba durmiendo y la dejó tranquila.
Sobre las 4 de la tarde, la policía acudió a su casa ya que Andrew había llamado por el estado de Amy. Fue encontrada muerta, encontrándose tres botellas (dos grandes y una pequeña) de vodka: algunos meses después se determinó que el nivel de alcohol encontrado en su sangre era de 416 miligramos por decilitro (el máximo de alcohol permitido en Gran Bretaña para conducir es de 80 miligramos por decilitro, imaginen...).
En honor a Amy se celebraron tres funerales: un funeral público (al que asistieron unas 150 personas), otro privado en el que Amy fue incinerada, y un tercero bajo las costumbres judías en el que estuvieron presentes las cenizas de Amy.
Las cenizas de Amy reposan en un cementerio llamado Edgwarebury Lane (situado en Londres), en la misma tumba que su abuela Cintia (Amy declaró en vida que quería ser enterrada junto a su abuela, a la que tenía un gran apego). Anteriormente habían estado en un columbario.
Fuente: libro "Amy,27", findadeath.com, es.wikipedia.org
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