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miércoles, 13 de septiembre de 2023

La corrida de toros de Pozoblanco

No he hablado en este blog acerca de la tauromaquia más allá del artículo que le dediqué hace un par de meses a la extinta plaza de toros "Monumental" de Sevilla. En el día de hoy trataré otro tema relacionado con la tauromaquia (y personalmente no creo que trate en muchas ocasiones más el asunto): la corrida de toros de Pozoblanco, aquella en la que Paquirri sufrió la cornada por la cual perdió la vida.

El 26 de septiembre de 1984 tenía lugar en el coso de Pozoblanco (Córdoba) una corrida de toros con un cartel conformado por Paquirri, El Yiyo y El Soro. Paquirri formaba parte de aquel cartel ya que Diodoro Canorea, gestor de "La Maestranza" y de la plaza de Pozoblanco, le había pedido faenar a cambio de no ir a la plaza sevillana como tenía estipulado (en aquel mes tenía lugar la feria de San Miguel). El diestro gaditano tenía además pensado que esa iba a ser su última corrida en España aquel año (a priori su última corrida tenía que haber sido en Logroño el día anterior, pero surgió aquel acuerdo con Canorea) por la cual cobraría 5 millones de pesetas de la época, antes de irse a Venezuela a torear en un festival y así rematar el año. 

Paquirri tenía pensado dejar el toreo en aquel entonces: El Soro comentaba que le dijo a él mismo "La próxima campaña te voy a apoderar, ya me cansé y lo dejo todo". Ya había amasado cierta fortuna (más de mil millones de pesetas, y se dice que tenía cuentas en Miami, Panamá y Venezuela) y quería aprovechar para disfrutar de su recién nacido (apenas siete meses antes de aquella corrida) hijo Kiko en su finca "Cantora", donde ayudaba a aquellos matadores con poca experiencia.

El toro "Avispado" (de la ganadería Salayero y Bandrés), el cuarto de la tarde en aquella corrida en Pozoblanco, le dio una cornada en la pierna que le rompió la arteria femoral y las venas ilíaca y safenal. Fue rápidamente llevado a la enfermería, donde, con una tranquilidad asombrosa, le dijo al doctor presente lo siguiente: "Doctor, yo quiero hablar con usted o no me voy a quedar tranquilo. La cornada es fuerte. Tiene al menos dos trayectorias, una para acá y otra para allá. Abra todo lo que tenga que abrir, lo demás está en sus manos. Y tranquilo, doctor.".

La enfermería tenía unas condicions deficientes ya que dicen que allí no había prácticamente nada y que estaba sucia y con telarañas. El doctor, Eliseo Morán, le hizo una cura de urgencia sin poder llegar a cortar la hemorragia, y ordenó que lo llevaran al hospital Reina Sofía de Córdoba. Sin embargo, no fueron capaces de llegar a dicho hospital debido al mal estado de las carreteras y tuvieron que desviar su camino al hospital Militar, pero no pudieron salvarle: en el camino sufrió un paro cardiaco y en el hospital Militar falleció (tenía 36 años). Le dieron el último adiós dos días después en "La Maestranza" y fue enterrado en el cementerio de San Fernando de Sevilla

A partir de aquella corrida, con el paso del tiempo se fueron sucediendo una serie de infortunios. Se dice que la corrida tiene supuestamente una maldición, apoyándose en el hecho de que si un toro que se lidia causa la muerte de un torero, debe ser sacrificado y ser quemada su cabeza, y toda su casta (incluyendo la madre del toro) debe ser sacrificada: la cabeza de "Avispado" no fue quemada, sino disecada.

El Yiyo sufrió también una cornada mortal en una corrida: el 30 de agosto de 1985, formaba parte del cartel en la plaza de Colmenar Viejo (sustituía a Curro Romero, que había presentado un parte médico un día antes que alegaba lesiones en la espalda). En la lidia del sexto y último toro de la tarde, llamado "Burlero", fue embestido de frente por el animal y cayó al suelo. Rodando en el albero, no pudo evitar al toro, que le levantó clavándole un cuerno en la axila, de tal manera que le partió literalmente el corazón en dos. Anduvo unos pocos pasos hasta caerse junto a la barrera y decirle a "El Pali" (no el famoso cantante, sino uno de los miembros de su cuadrilla): "Pali, este toro me ha matado". No pudieron hacer nada por él en la enfermería y murió (tenía 21 años). Su cadáver fue llevado a su casa vestido con un traje de luces, y se le enterró en el cementerio de Madrid.

 

El Soro es el único torero de aquel cartel de Pozoblanco que aún vive (en el momento de escribir este texto). Sin embargo, diversas lesiones le forzaron a dejar el toreo de forma activa tiempo antes de lo que seguramente a él le hubiera gustado: en 1993, durante una corrida en Montoro, al ir a poner un par de banderillas, resbaló al estar el suelo húmedo por lluvias recientes y se lesionó los ligamentos de su rodilla izquierda. Debido a dicha lesión, apenas pudo estar en dos corridas más al año siguiente, y en una de ellas, en Benidorm, se lesionó un tobillo al saltar la barrera, lo que empeoró su condición física. Ha sufrido más de 60 operaciones en sus piernas, y en los últimos años tuvo problemas de salud aún más graves: un infarto de miocardio y una infección en su rodilla (tenía una prótesis en ella) en 2018 y una angina de pecho en 2020.

Otros personajes involucrados en la supuesta maldición son los siguientes:

-Juan Luis Bandrés: uno de los propietarios de la ganadería a la que pertenecía el toro "Avispado", fue asesinado a tiros el 15 de diciembre de 1988 cuando tenía 41 años en Algeciras. Tenía la propiedad, junto a Sayalero también, de la naviera Isleña de Navegación (Isnasa), que tenía una plantilla de 400 empleados y compartía con Transmediterránea el transporte marítimo en el estrecho de Gibraltar. Uno de los empleados, Benito Cózar, fue despedido cinco años antes por un altercado con el capitán de un buque de la empresa, y desde entonces trabajaba de forma interrumpida en Isnasa con diversos contratos temporales (esperaba que le contrataran de nuevo en aquel diciembre de 1988). Cózar le disparó tres veces con una pistola de competición, provocándole así la muerte. Por este crimen, fue enviado a la cárcel. 

-Tomás Redondo, que fue el apoderado de "El Yiyo", fue encontrado ahorcado en una casa el 10 de julio de 1989. La muerte del joven torero al que apoderó fue la causante de que dejara temporalmente su labor (tiempo después llegó a apoderar al hermano de "El Yiyo". 

-Antonio Salmoral, el hombre que filmó tanto la cornada a Paquirri como las imágenes del torero en la enfermería de la plaza de Pozoblanco, intentó trabajar por ese motivo en TVE, sin llegar a conseguirlo nunca. El 3 de octubre de 1987, tras una larga enfermedad, falleció a la edad de 53 años. 

Fuente: elcierredigital.com, es.wikipedia.org, sevilla.abc.es

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