La muerte de Janis Joplin

Ya dediqué un artículo a hablar de Janis Joplin en su día, y hoy dedico este a hablar de su muerte. Lean, lean...

El desafortunado incidente tuvo lugar en la madrugada del día 4 de octubre de 1970. El día antes, Janis y su banda en aquel momento, la Full Tilt Boogie Band, estuvieron grabando canciones para el que iba a ser el nuevo disco de Janis, "Pearl".

Sobre la una de la madrugada, tras tomar unas copas, todos se fueron al hotel donde se hospedaban, el Landmark de Hollywood. Justo después de inyectarse una dosis de heroína que se había preparado (Janis había estado en rehabilitación para tratarse su adicción, pero había recaído durante las grabaciones de "Pearl" debido al intenso ritmo que estaban manteniendo), Janis bajó a recepción para pedir cambio de 5 dólares y así poder sacar tabaco de una máquina.

Allí mantuvo una conversación durante un rato con el recepcionista, que sería la última persona que la vio con vida (y curiosamente él no tenía ni idea de quién era). Tras sacar su cajetilla de tabaco, volvió a su habitación y dejó el tabaco sobre la cama. Justo después, le sobrevino una sobredosis que sería fatal. Cayó al suelo, casi rompiéndose la nariz en el proceso.

Al día siguiente, al ver que Janis no aparecía por el estudio de grabación (Janis solía ser puntual con las grabaciones), John Cook (uno de los miembros de la banda) decidió llamarla por teléfono. Al no encontrar respuesta, llegó a la habitación de Janis y la encontró en el suelo, ya muerta (llevaba horas en ese estado).

La dosis de heroína que Janis había consumido tenía un grado de pureza muy alto: un 40 %, cuando lo normal es que sea de un 2 %. El camello que se la suministró le pasaba las drogas a un experto que comprobaba el estado de las drogas y las cortaba, pero al no disponer de esa persona, se la vendió sin más. Lógicamente el cuerpo de Janis no pudo soportar la dosis.

El cuerpo de Janis fue incinerado, y sus cenizas fueron depositadas en el océano Pacífico (en la playa Stinson). Tras su muerte, se organizó una fiesta en honor de Janis, ya que ella misma había legado en su testamento un total de 1500 dólares para tal fin. En dicha fiesta actuaron los conocidos Grateful Dead.

La última canción que Janis pudo grabar en vida fue "Mercedes Benz", que fue publicada en el disco "Pearl" sin base instrumental, para homenajearla.



También se dejó a modo de homenaje la base instrumental de "Buried alive in the blues" (ironías del destino). Se había grabado dicha instrumental a la cual Janis dio su visto bueno, pero nunca pudo grabar la parte vocal que pertenecía a la instrumental.



Fuentes: findadeath.com, jovenesmuertos.blogspot.com