"Good God almighty! Good God almighty! That killed him!"

En la historia del wrestling hay combates verdaderamente famosos e iconos del negocio. Uno de ellos es el que voy a tratar en este artículo: el Hell in a Cell en el que participaron The Undertaker y Mankind (Mick Foley).

A mediados de los 90, Mankind y The Undertaker habían estado enfrentados durante un tiempo, ya que Mankind provocó varias derrotas del Undertaker. Sin embargo, la rivalidad cesó hasta que en 1997 se retomó.

En 1997, en el evento King of the Ring se programó un combate Hell in a Cell (jaula "infernal" de metal de grandes dimensiones) entre Mankind y Undertaker. Días antes, Terry Funk (amigo de Foley, con el que había coincidido tiempo antes en empresas como ECW) le comentó a Foley entre risas que debía hacer un "spot" consistente en que era tirado del techo de la jaula por Undertaker. Sin embargo, después de ello, Foley llegó a decir que "creo que puedo hacerlo".

Una vez en el evento, en lo que era el penúltimo evento de la noche, se produjo el combate. Mankind, tras aparecer, inmediatamente subió al techo de la jaula, cosa que también hizo Undertaker.

Tras lo que pudieron ser aproximadamente unos 2 o 3 minutos de pelea en el techo, The Undertaker hizo lo que Foley pensaba hacer: tiró a Foley de lo alto de la jaula sobre la mesa de comentaristas españoles.



Esta caída dio lugar a una de las frases más míticas del wrestling, dicha por Jim Ross en la otra mesa de comentaristas, y que está puesta como título de este artículo: "Good God almighty! Good God almighty! That killed him! With God as my witness, he´s broken in half!"

Debido a esto, a Foley lo colocaron en una camilla para que recibiese atención médica, pero cuando se lo estaban llevando, increíblemente se levantó volvió a lo alto de la celda para continuar el combate.

Una vez allí, Undertaker le aplicó su llave "Chokeslam" sobre el techo... Que cedió, y Foley volvió a caer desde varios metros de altura, aunque esta vez sobre el ring.



Cabe destacar que esta segunda caída NO estaba prevista que ocurriera. Tras esta caída, es icónica la imagen de Foley con varios dientes rotos.

Y aún así, Foley continuó peleando. Tras varios minutos más de combate en los que recibió un golpe de espaldas sobre una miriada de chinchetas, perdió tras recibir el finisher de Undertaker, el "Tombstone piledriver".

Las lesiones que sufrió Mick Foley en el combate fueron estas:

-Conmoción cerebral
-Hombro izquierdo dislocado
-Varias costillas rotas
-Hemorragia interna
-Heridas de pinchazos (derivados de las chinchetas)
-Mandíbula dislocada, que fue puesta en su sitio durante el combate
-Dientes rotos

Un combate que siempre será recordado.

Fuentes: whatculture.com, es.wikipedia.org, wwegeek.blogspot.com